domingo, octubre 19, 2008

En dique seco

Han pasado 3 semanas desde el maratón de Berlín y sigo en el dique seco.

Aunque el traumatologo me había dicho que de momento siguiera sin actividad (esta semana tendre los resultados de la resonancia), ayer intente rodar un poco para que en caso de que el resultado fuera positivo intentr correr hoy los 10 km de la marató del mediterrani, pero los dolores no tardaron en aparecer. No eran dolores fuertes pero junto con la sensación de que mis piernas estaban totalmente agarrotadas y oxidadas me hicieron plantearme que lo mejor era ser conservador y darme una semana más de descanso.

He decidido afrontar la causa de la lesión y mañana lunes vuelvo al podologo y estoy propuesto a pasar el periodo de adaptación necesario para poder adaptarme a ellas.

Siento un mono importante de correr, pero he de reconocer que mi cuerpo esta agradeciendo el descanso. Espero poder volver a correr pronto y lo iré haciendo con calma (me voy a apuntar a un gimnasio para poder nadar y compatibilizarlo con el running), y una vez que se que no he sido admitido en el maratón de Londres mi próximo objetivo será el maratón de Barcelona.

Espero pronto poder hacer un post contando mis sensaciones en la vuelta al asfalto.

Fotografias del Maratón de Berlin 2008

Con José Luis el día anterior en la entrada de la feria.

Colgando nuestra Reason to run (como ya hicimos el año pasado), este año premonitoria "porque estoy cojo"
Haille estaba presente en el ambiente
Una de las imagenes que más me gusta, en Berlín la tradicional línea azul del maratón se convierte en tres lineas intermitentes.
En el km.35 sufriendo
Una foto de la organización, me encanta. No hay nada como ir lento para poder posar...
Con Pilar una vez hemos llegado, nuevamente en la puerta de Brandenburgo
Celebrando la sexta: Un litro de cerveza y un buen codillo.

domingo, octubre 05, 2008

Maratón de Berlin 2008. Crónica personal

Reproduzco la cronica que escribí el lunes tras el maratón de Berlín enel Blog de Victor GO.


Una maratón más y van seis a mi zurrón.

Sin embargo, en esta he aprendido cosas muy diferentes de las anteriores. He sufrido mucho, muchisimo aunque mi ritmo medio cardiaco medio ha sido R0-A1 y he tardado más que nunca: 4h12'15''.

Como sabeis los últimos quince dias no había podido correr porque las molestias en el piramidal no me dejaban, sin embargo estaba convencido que con descanso llegaría a Berlín y por lo menos nos defenderiamos. Llamada a un gran amigo médico - APA (y maratoniano, que entiende los que son las ganas) y me receta un cocktail de pastillas para "aguantar".

Llega el domingo y el ambiente es perfecto, la climatología tambien (despejado, fresco y no muy humedo). Antes de entrar al cajón pasa a mi lado Gebrelaise calentando con su grupo de liebres (aplaudimos, no me hubiera creido en ese momento las 2h03'59''). Cajón E. No había viajado con Sporttravel por lo que habia ido por mi cuenta junto con un amigo, el dia anterior en la feria medio en serio medio en broma [b]Carlos[/b] dijo que como era el más alto lo veriamos. De forma increible nos juntamos todos: [b]Carlos Sadurni, Carlos, Jaume, Joan Lluis, Hector, Pablo...[/b].

Salimos, sigo al grupo, nos ponemos a 4'50'' en seguida (esto es una salida bien organizada), llega el km.2 y los dolores musculares ocultos por la tortilla de pastillas salen a flote con fuerza. Al amigo que me acompañaba le digo que se vaya, "esta no es mi carrera" (aún no lo sabia pero si que lo iba a ser pero de una forma diferente). El dolor sube y mi ritmo baja (5'40''). Llego al km.5 paro a beber en el avitullamiento y no soy capaz de volver a correr. Me planteo retirarme (es lo sensato y quiza pueda correr Mediterrani dentro de tres semanas) pero aunque en las ultimas horas había intentado prepararme para ello, no puedo. Quiero acabar o al menos intenatrlo.

Consigo volver a correr a un modesto 6'/km, me pasan cientos y cientos de runners (algunos con bastantes malos modos) y voy haciendo kms (me doy cuenta que a ritmo constante duele menos). Llego al 10 (y me parece que lleve una eternidad corriendo), me arranco la pulsera con la lista de tiempos y decido que quiero disfrutar. De hecho esto parece darme fuerza y sigo hacía adelante.

Sufriendo llego a la media maratón en más de dos horas, en aquel momento mi único calculo me lleva a pensar que esta maratón la acabo (me queda media maratón que andando me puede llevar 4 horas: Justo antes de cierre de control!!!).

En la media me alcanza la oleada de runners que lleva un ritmo parecido al mio (por fin han dejado de pasarme!) y hasta el km.27 el ritmo me permite olvidarme del dolor y disfrutar del perfecto ambiente. Pero la entrada en el km 28 hace que el dolor vaya a mas, pienso en parar en una asistencia médica pero tengo miedo que no me dejen seguir. Se que mi mujer esta en el 35 y debo aguantar, K'damm Strasse es un infierno (nuevamente me pasa todo el mundo), simulando la mejor de mis caras para no preocupar y por dignidad llego hasta ella, le doy un beso y le digo que no se preocupe que voy a llegar. El dolor crece, y me entran una ganas horribles de llorar (mezcla de dolor y de orgullo por estar aguantando y tener gente que me apoya). Mi ritmo ya esta por encima de los 7'/km y mis pulsaciones en R0.

Los kilometros este ritmo son eternos, en el 39 veo a [b]Victor[/b] que me anima (que inyección de animo!) y me vuelven las ganas de llorar (menos mal que no soy de lágrima facil). Los dos últimos kilometros son eternos, cuando veo la puerta de Brandenburgo (parecia que alguien la alejaba porque no se llegaba nunca) se que lo he conseguido, se que he ganado a mis dolores y que voy a acabar.

Llego a la meta, a mi lado una chica llora mientras me enseña con orgullo su polar marcando 3h59' y muchos segundos. Emocionante.

Para muchos lo que hice no deja de ser una imprudencia o una tonteria, para mi ha sido una vertiente diferente y muy enriquecedora del sufrimiento del maratón, y sobre todo un orgullo el conseguir la meta sin importar de verdad la marca.

Como os imaginais hoy me cuesta caminar pero ha merecido la pena.


Podré decir que por segunda vez corrí el maratón de Berlín en el que Gebre batio el record del mundo y un hombre bajo por primera vez de las 2h04.