I wanna run, I want to hide
I wanna tear down the walls
That hold me inside.
I wanna reach out
And touch the flame
Where the streets have no name.
I wanna feel sunlight on my face.
Durante mucho tiempo creí que esta canción se refería a NY, este mismo año en mi visita a Belfast me entere que la base de esta canción estaba precisamente allí, una ciudad en la que sabiendo donde vives podrías saber cuales son tus inclinaciones politicas y religiosas. Pero en Manhatam las calles tampoco tienen nombre sino número.
Aunque esta semana he dudado entre varías canciones (Boston de K.Chestney y Asturias de Melendi principalmente) esta, además de gustarme escucharla mientras corro, trasmite muy bien en la estrofa que he puesto como me siento últimamente. Algún día romperemos esos muros.
Cada vez me gustan menos las carreras de 10 km que me parecen demasiado agónicas como para poder disfrutar de correr. Esta vez tenía la perfecta excusa con tener una tirada de 20km. Así quede con Xavi y Jordi para bajar a Barcelona prontito y hacer 10k previos. Precioso recorrido: Paralelo, Paseo Colón, Paseo Juan de Borbón hasta el Hotel Vela y media vuelta. Tremendo bochorno y ritmo de menos a más sudando de una manera increible.
A la salida de la cursa con la idea de hacer lo que se pueda pero sin excesos. Xavi y Jordi salen fuerte y en el kilometro 2 decido que ese no es mi ritmo he intento regular aprovechando que los 5 primeros kilometros son cuesta abajo pero no consigo recuperar el cuerpo. Paso por el km 5 en 23:10 y por un instante fugaz me planteo seriamente pararme. Mantengo mi ritmo y poco a poco mi cuerpo se va recuperando y por primera vez, a partir del kilometro 7, empiezo a pasar gente. Los últimos kilometros me voy sintiendo más fuerte y el último kilometro (cuesta arriba) me siento bien. Al final un discreto 46:55 pero que cuadra perfectamente con mi intención de hacer un buen entrenamiento (20k en 1h38).
Compilación NY11
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