No es este el primer post sobre este circuito de entrenamiento que tanto gusta incluir a Victor en sus planes de entrenamiento. Esta vez incluía un comentario en el que nos pedía que no faltasemos porque es un circuito del que se aprende mucho.
No voy a volver a hablar sobre los duros repechos, ni sobre las bajadas por rieras estrechas de estos 20 km, voy a hablar de lo que "mucho que se aprende" en este recorrido.
los primeros kilometros los hice en pequeño grupo tratando de llevar un ritmo adecuado pero reservarme para las cuestas del 5 al 10. Justo antes de empezar las trialeras el grupo se agranda y nos ponemos de a uno, llega las cuestas más duras y las piernas pueden lo que pueden y nos vamos descolgando del grupo, trato de no hundirme y no cebarme. Me mantengo haciendo la goma y voy cogiendo los que se van descolgando.
Empiezan las cuestas abajo, y aprieto para no perder de la vista a Eduard que es el que me precede, me parece ver a Victor delante a tiro (luego supe que Victor estaba enfermo y se había hecho el recorrido previamente, y se escondio para "no darme el gusto" de pasarlo) pero pronto lo pierdo y sigo.
Las pulsaciones van bien a pesar de los repechos e incluso soy capaz de regular el inicio de un ataque de flato. Lucho contra los malos pensamientos cuando veo imposible volver a unirme al grupo o coger a Eduard, pero trato de seguir y acabar cuanto antes de sufrir (la semana ha sido dura; viaje a Canarias, cenas de trabajo... y el cuerpo no perdona pienso).
Llego, bastante bien aunque con dolor de piernas: 1h45' en 20 km. El grupo me ha sacado 2 minutos. Contento de vencer una vez más a Mataro Hell pero con sabor agridulce.
Cuando llego a casa consulto el archivo del Garmin para ver como me fue durante anteriores preparaciones y para mi sorpresa veo que en el mismo recorrido en la preparación de Berlín hice 1h53', es decir 8' menos!!.
De esta situación he aprendido/recordado lo siguiente:
- El control de los malos pensamientos es una de las claves en el maratón, el hecho de sentirme mal por perder el ritmo del grupo pudo estropearme mi mejor Mataro Hell
- Precisamente el saber descolgarme del grupo y no cebarme ha sido una de las claves para poder recuperar tiempo y no caer en pajaras como les ocurrió a otros compañeros.
- En el maratón luchamos contra nosotros mismos y debo mejorar mi autoconocimiento para no caer en trampas de mi cerebro.
Releo el post y lo veo confuso y enmarañado, pero creo que merece la pena publicarlo.
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