Los que me conoceis o leis este blog sabéis que las carreras de 10 km no son precisamente mi preferencia: de hecho hasta no hace mucho había corrido más maratones que carreras de 10 k.
Siempre que he podido he preferido una media a un 10km, pero desde que me he venido a vivir a Madrid me resulta dificil encontrar medias maratones que cuadren con mis planes y en cambio cada domingo hay al menos 1 o 2 10 k faciles de correr. Esto me ha llevado a llevar 7 10k este año (y el domingo que viene haré el 8), más que en los últimos 3 años.
No voy a decir que difrute de estas carreras pero les voy cogiendo el puntillo y han dejado de ser un mal necesario en mis planes de entrenamiento.
Así el domingo pasado corrí La carrera Liberty, un 10 k relativamente nuevo pero bastante popular. Salida desde el Palacio de los deportes y recorrido típicamente madrileño (esto es, la mitad cuesta arriba y la otra mitad cuesta abajo.
Salida cuesta abajo el primer kilometro y luego 5 km de cuesta arriba, Castellana arriba donde aguanto bien el ritmo aunque sin forzar tratando de tener resuello (dado mi actual estado de forma) en la parte final. Todo conforme a los planes hasta que me enfrente a la última de las cuestas en la calle Concha Espina donde me reencontre con el corazón saliendose por la boca. A pesar de ello, buena recuperación en la fase final para afrontar Goya con el último impulso, bajando de los 45' que es el mínimo de decencia que me he marcado en esta época de mantenimeinto. Al final 44:32.
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